Melitón Guevara Castillo
Desde esta Esquina
Es, obvio, un compromiso también de Egidio Torre Cantú.
Por eso, en más de una ocasión, Rafael González Benavides ha sentenciado que van de 8 x 8, sin hacer referencia al bulevar de la capital.
La cuestión es que, entre los antecedentes, hay que en 12 años se ha perdido 6 diputaciones locales. Así que, si se ganan más de 2, es que se recupera el terreno como una consecuencia de hacer un buen gobierno y una buena política.
Y es que las palabras del líder son contundentes: “Puntualmente lo dije frente a nuestros dirigentes y delegados y lo he dicho frente a nuestro líder nacional César Quiroz Camacho, vamos no sólo para obtener el poder, no sólo para empoderarnos, sino para seguir fundamentalmente contribuyendo con esa visión de nación que el Presidente Enrique Peña Nieto ha seguido…”.
¿Asumiría Florentino Sáenz Cobos cada una de las palabras de su líder nacional?
Florentino Sáenz Cobos llega al poder campesino en un contexto donde, dicho poder, al menos para el PRI ha dejado de ser contundente en procesos electorales.
La mejor prueba es que el PAN ha ganado en algún momento hasta 8 municipios, considerados rurales: Soto la Marina, Llera, Gómez Farías, Xicoténcatl, Ocampo, Nuevo Morelos, Padilla, Guemez, Miquihuana y Mainero, entre otros.
Ganan porque el PRI ya no responde con eficacia a los intereses de los campesinos.
Los campesinos han estado organizados, históricamente, para dos tareas: votar y para apuntalar la protestas de unos y otros.
De esto, sabe muy bien Tino Sáenz por algo ya fue alcalde de Mante y su paso por la política ha sido, sin la menor duda, gracias a los votos y el apoyo de los distintos grupos campesinos.
Que ahora lo tienen de líder y saben, bien que saben, que más de un líder los ha apoyado con demagogia, pero no en los hechos. Tino tiene la oportunidad para redimir al liderazgo campesino.
Los campesinos han sido, histórica y tradicionalmente, priistas.
Hoy el mapa ha cambiado, el voto verde, sigue existiendo, pero ya no es tan avasallador. Tiene, sin embargo, el voto verde una coyuntura: decidir una elección.
Así ha sido, por ejemplo, el tradicional Mante; ahí de donde es Tino, ahí donde el candidato será Alejandro Guevara Cobos: el PRI, su candidato, han perdido en la zona urbana, pero se recuperan en la rural.
Al menos, eso y más, se ha dicho, respecto a triunfos del PRI tanto en Mante como en la capital del Estado.
Juan Báez dejó el liderazgo campesino a Tino Sáenz en un mar de acusaciones; a Báez hasta se le acusó de ser panista, de explotar a los campesinos, de aprovecharse de su esfuerzo y trabajo, de ser un coyote más.
En este contexto es como llega Tino al liderazgo, al poder campesino; sus antecedentes no dan, así lo creo, oportunidad para pensar que será un liderazgo distinto… En esa coyuntura, el PRI seguirá perdiendo el voto verde.
El poder campesino sigue presente: solamente que ya no es exclusivo del PRI.
Al menos no lo fue durante 12 años de gobierno panista: la elección de este año será indicativo, evidente, de lo que ahí está sucediendo.
¿Les está fallando el PRI? Porque, entonces, en ciertos momentos y en ciertos lugares de Tamaulipas el PRI ha perdido de manera sistemática uno que otro municipio?
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