Un matadero clandestino de caballos, burros, mulas y otras especies, cuya carne se vendía a taquerías, carnicerías y diversos negocios en Saltillo y Monterrey, Nuevo León fue clausurado por autoridades, quienes detuvieron además a seis personas y rescataron a poco más de una docena de animales.
El rastro, que operaba fuera de la ley, se ubica en el kilómetro 10 de la carretera federal 57 Antigua Monclova-Saltillo y fue detectado durante un operativo conjunto entre el Grupo de Reacción Operativa Metropolita, la Secretaría de Salud y Protección Civil del Estado, como parte de las acciones que se llevan a cabo para detectar este tipo de negocios que operan fuera de la ley.
En el lugar se encontró una "fosa a cielo abierto" donde se arrojaban los restos de los animales que sacrificaban ahí.

También hallaron herramientas que utilizaron para destazarlos y un revolver con el que se presume los mataban.
Las fotografías tomadas en el lugar muestran las condiciones insalubres en las que se operaba.

Las autoridades informaron que se descubrió además varias canales (animales ya sin piel) y una gran cantidad de carne echada a perder así como potrillos muertos, cabezas de caballo y viseras de animales.
Además, rescataron seis caballos, una burra preñada, seis chivas, dos vacas, una mula, un becerro y un borrego.
Los detenidos coincidieron en que diariamente sacrificaban de cuatro a cinco caballos.
Al respecto, el secretario de gobierno, Víctor Zamora Rodríguez, aseguró que se han clausurado en la región de la Laguna al menos 10 rastros clandestinos por condiciones de insalubridad o por sacrificar animales que habían sido robados, siendo así presuntos culpables del delito de abigeato, es decir, hurto de ganado.
Estas acciones que se extenderán a todo el estado se derivan de los acuerdos del Grupo de Coordinación Operativa, a fin de garantizar que la carne que se vende en Coahuila sea salubre.