Rogelio Rodríguez Mendoza

Confidencial

Autoengaño.

Como instrumento de medición interno, para usos propios, ya sea de un candidato en particular o de algún partido, las encuestas suelen ser efectivas.

Permiten al que las ordena conocer su realidad y enderezar rumbos equivocados.
Sin embargo, si las encuestas se quieren utilizar para presumir delanteras y con ello intimidar al contrario o influir en el ánimo del electorado, la verdad, no sirven.

Es iluso, por decir lo menos, pretender adelantar triunfos o asustar rivales electorales con un sondeo de ese tipo. Creer que eso funciona así es autoengaño.
Le cuento de ello porque en los últimos días he visto cómo el PRI y el PAN han publicado sendas encuestas que les dan ventaja a uno sobre el otro.

Como le decía, la del PRI coloca en la delantera de las preferencias electorales a su candidato, Baltazar Hinojosa Ochoa, y la del PAN, obviamente señala como puntero a Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
En el ánimo de sumarle credibilidad a las cifras, el PRI presume que su encuestadora, el periódico El Universal, es una de las más prestigiadas, pero lo mismo hace el PAN con Mitofsky.
Pero le insisto, de nada sirven las encuestas.

Primero, porque las tendencias electorales nunca son constantes. Cualquier situación puede calar en el ánimo ciudadano de manera que quienes hoy pensaban votar por el PRI terminen haciéndolo por el PRI, o viceversa.
Y segundo, porque el elector de hoy es tan maduro que , a fuerza de tanta publicidad, ha aprendido a proteger la secrecía de su voto.

Ha aprendido también a sobrevivir al manipuleo mediático de los partidos. Agarra de todo, despensas y cualquier cosa que le ofrezcan, pero no entrega su voto.
De esa manera, como le decía, las encuestas pueden servir para corregir yerros propios de los candidatos o partidos, pero son dinero tirado si se quieren para inducir el voto o intimidar al de enfrente.
Si los partidos y en particular quienes buscan un cargo popular, no entienden eso estarán perdidos desde ahora.

EL RESTO.

Uno.- El dirigente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, aseguró en Tampico que nunca dijo lo que dijo en relación a los candidatos tricolores por las alcaldías de Hidalgo, Villagrán y Mainero, a quienes el pasado 7 de mayo acusó, a través de un twitt, de estar ligados al crimen organizado, y anunció su expulsión.
Este fin de semana, el jerarca priista, acusó a los periodistas de haber mal interpretado sus declaraciones y que nunca acusó ligas con el crimen.

Ahora señala que en realidad, Reyes Wenceslao Zúñiga Vázquez, Gustavo Estrella Cabrera y Luis Cesáreo Aldape, fueron expulsados del PRI, por apoyar al candidato del PAN, Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
Lo que sea, lo único que queda claro es que los priistas siguen de tropezón en tropezón.

ASI ANDAN LAS COSAS.

roger_rogelio@hotmail.com